PRESENTACIÓN DEL LIBRO CRUCE DE CAMINOS DE MARGA GIL BENÍTEZ EN LA GALERÍA DE ARTE MARGUI LÓPEZ Y ARTEADISCAR
El pasado viernes, 13 de enero, presenté a la autora
Marga Gil Benítez y su libro Cruce de caminos, el comienzo.
Unas veinticinco personas nos acompañaron en el acto.
Tengo que decir que conocí a Marga hace poco, en una de las presentaciones que hizo de la novela que nos traía, Cruce de caminos, el comienzo. Pero, aunque llevo poco conociéndola, ya sé dos cosas importantes de ella:
La 1ª, su gran humanidad (ya me ha cautivado como persona).
La 2ª, después de leer Cruce de caminos, el gran talento que tiene.
Marga Gil Benítez, nació en Jerez de la Frontera, aunque debió haber nacido en Ubrique, de donde procede su familia.
A los ocho meses de nacer, su padre se traslada a Málaga capital, porque obtuvo una plaza de administrativo por la Junta de Andalucía.
Así que sus inicios como escritora están aquí, en Málaga, comenzó escribiendo relatos cortos muy personales y en los ratos de aburrimiento dibujaba.
Más tarde escribiría sus primeras novelas, que nunca ha llegado a publicar y no tiene intención de hacerlo, pues ella piensa que reflejan la inmadurez de una escritora novata.
EL ORIGEN:
Algunos de esos párrafos los ha incluido en CRUCE DE CAMINOS, EL COMIENZO, cuyo protagonista, Arturo Sanjulián, estaba en su cabeza desde hacía muchos años.
LA ANÉCDOTA:
A finales de los noventa, comenzó a escribir CRUCE DE CAMINOS y tardó unos años en acabarla, pues, también según ella misma, “No es constante escribiendo”. Un fallo hizo que al poner la palabra “FIN” borrase todo el archivo del ordenador y el mundo se hundió para ella. Estuvo en shock y deprimida, porque no consiguió recuperar la novela.
Después de un tiempo de abandono, la sangre que lleva de escritora, comenzó a hervirle y supo que había llegado el momento de reescribir CRUCE DE CAMINOS con los retales que conservaba (algunos capítulos impresos y otros escritos a mano y lo que quedaba en su memoria).
Parece que en un principio quiso abandonar su corta carrera de escritora, pero fue como si el propio personaje le pidiera que le devolviese la vida.
En 2011, con la novela ya mejorada, decidió publicarla. No fue una experiencia para recordar, pues no tuvo mucho apoyo.
Pasaron los años y siempre iba arrastrando por todos los grupos de Facebook su única novela publicada hasta el momento (ahora la tenía en Amazon), ganando de vez en cuando algún lector/a.
Decidió que tenía que publicar otro libro y como no le apetecía escribir algo nuevo, una recopilación de relatos: HISTORIAS DE UNA CUENTISTA.
Al año se propuso un reto: escribir una novela romántica en un mes. Y casi lo consigue, aunque al llegar a la mitad, desiste y abandona la idea, por verla demasiada edulcorada para su gusto (no es asidua de la literatura romántica). Gracias a la insistencia de una amiga que quería leerla "una vez terminada" y no poco a poco, la terminó, añadiéndole una parte importante de suspense. Había nacido UN DULCE RUBOR, un libro que le ha dado muchos momentos de alegría. Es una novela imán.
Actualmente está escribiendo una novela de género paranormal que, como todas sus historias, tiene una trama repleta de giros. Adora engañar al lector, llevarlo por un camino y que luego descubran que el camino es otro.
Está encantada con sus lectores, porque le envían WhatsApps mientras leen las novelas y ponen verde a ciertos personajes y ella se ríe, pensando en los engañados que los tiene.
También tiene escrita la escaleta de lo que será una segunda novela de la serie CRUCE DE CAMINOS, pues piensa que esos personajes se merecen resolver más casos.
Es una obra que te engancha nada más empezar a leerla, género detectivesco, de suspense, prosa ágil, personajes bien perfilados, bien escrita, sentido del humor, ironía y muchas sorpresas. Me sorprendió el dominio del género, propio de alguien que se ha empapado de este tipo de lecturas y de muchas más, lectora voraz.
Opino que es una lectura apta para todos los públicos, tanto adultos como adolescentes, pueden pasárselo bien recorriendo estas páginas.
Según Richard Bach, autor de la obra Juan Salvador Gaviota “Un escritor profesional es un amateur Agradezco mucho que Marga no se rindiera y volviera a darle vida a Arturo Sanjulián y a Cruce de caminos porque he disfrutado mucho leyéndola y seguro que ustedes, vosotros también lo vais a hacer.
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